Un desastre natural puede referirse a una interrupción o una pérdida de datos causada por eventos naturales, como terremotos, inundaciones, incendios, tormentas, entre otros. Los desastres naturales pueden tener un impacto significativo en la infraestructura de tecnología de la información de una empresa u organización, y pueden causar interrupciones prolongadas del servicio o incluso la pérdida total de datos.
Por ejemplo, una inundación puede dañar los sistemas informáticos de una empresa y provocar la pérdida de datos importantes, mientras que un terremoto puede interrumpir las comunicaciones y la electricidad, lo que puede dificultar la operación de los sistemas y servicios en línea. Además, los desastres naturales pueden afectar la infraestructura física de los centros de datos y las redes de comunicaciones, lo que puede interrumpir el servicio a los usuarios.
Para minimizar los impactos de los desastres naturales en la ciberseguridad, las empresas y organizaciones deben implementar medidas de contingencia y planes de recuperación de desastres.
Tipos de desastres naturales
Los desastres naturales son eventos extremos y destructivos causados por fuerzas de la naturaleza. Estos eventos pueden tener un impacto devastador en las comunidades, el medio ambiente y la economía. Aquí tienes una lista de algunos de los principales tipos de desastres naturales:
- Terremotos: Movimientos súbitos de la corteza terrestre que pueden causar daños estructurales graves y desencadenar tsunamis.
- Tsunamis: Olas gigantes y destructivas, generalmente desencadenadas por terremotos submarinos, erupciones volcánicas o deslizamientos de tierra en el océano.
- Huracanes, ciclones y tifones: Tormentas tropicales con vientos extremadamente fuertes y lluvias intensas que pueden causar inundaciones, marejadas ciclónicas y daños severos.
- Tornados: Torbellinos violentos con vientos en forma de embudo que pueden causar destrucción en un área localizada.
- Inundaciones: Desbordamientos de ríos, lluvias intensas o marejadas que inundan áreas terrestres, causando daños a la propiedad y poniendo en peligro vidas.
- Erupciones volcánicas: Liberación de magma, ceniza y gases desde un volcán activo, lo que puede destruir paisajes y comunidades cercanas.
- Deslizamientos de tierra: Movimientos de tierra y rocas colina abajo, a menudo causados por lluvias intensas o terremotos, que pueden sepultar viviendas y carreteras.
- Sequías: Períodos prolongados de tiempo seco que pueden agotar los recursos hídricos, afectar la agricultura y causar hambrunas.
- Incendios forestales: Incendios incontrolados en áreas boscosas que pueden destruir vastas extensiones de terreno y amenazar la vida y la propiedad.
- Temblores de tierra (sismos): Movimientos sísmicos menores que los terremotos, pero aún capaces de causar daños en edificios y estructuras.
- Tormentas de nieve y avalanchas: Acumulaciones de nieve acompañadas de fuertes vientos que pueden causar bloqueos de carreteras y provocar avalanchas mortales.
¿Cómo mitigar los desastres naturales provocados en ciberseguridad?
Mitigar los desastres naturales en ciberseguridad se refiere a las medidas que se toman para minimizar el impacto de eventos naturales, como terremotos, inundaciones, incendios forestales, tormentas, etc., en la infraestructura tecnológica y los sistemas de una organización. Aquí hay algunas formas de abordar esta mitigación:
- Respaldos fuera del sitio: Mantén copias de seguridad de datos críticos y sistemas fuera del sitio, en ubicaciones geográficamente separadas. Esto garantiza que los datos no se pierdan en caso de un desastre natural localizado.
- Infraestructura resistente: Diseña y construye centros de datos y otras infraestructuras críticas de manera que sean resistentes a los desastres naturales locales. Esto puede incluir medidas como refuerzos estructurales y sistemas de energía de respaldo.
- Recuperación ante desastres: Implementa planes de recuperación ante desastres que definan los procedimientos para la restauración de sistemas y datos después de un evento catastrófico. Realiza pruebas regulares de estos planes.
- Monitoreo y alerta temprana: Utiliza sistemas de monitoreo avanzado para detectar eventos naturales, como terremotos o tormentas, y alertar al personal de TI para que puedan tomar medidas preventivas, como apagar sistemas de manera segura.
- Virtualización y nube: La virtualización y la computación en la nube permiten la flexibilidad para migrar cargas de trabajo y datos a ubicaciones seguras en caso de un desastre.
- Diversificación geográfica: Si es posible, distribuye infraestructuras y sistemas en diferentes ubicaciones geográficas para reducir el riesgo de que todos se vean afectados por un solo desastre natural.
Problemas reales en la industria tecnológica a causa de un desastre natural
Los desastres naturales pueden tener un impacto significativo en la industria tecnológica y dar lugar a diversos problemas, desde pérdida de datos críticos hasta interrupciones en la cadena de suministro y en la producción, entre ellos:
- Pérdida de datos críticos: Las inundaciones, incendios u otros desastres pueden destruir servidores y centros de datos, lo que conlleva la pérdida de datos críticos. Esto puede resultar en una interrupción significativa de las operaciones comerciales y pérdidas financieras importantes.
- Tiempo de inactividad de sistemas y servicios: Los desastres naturales pueden causar daños físicos a la infraestructura tecnológica, lo que resulta en tiempos de inactividad prolongados para sistemas y servicios esenciales. Esto puede afectar la productividad de la empresa y la satisfacción del cliente.
- Interrupción de la cadena de suministro: Si los proveedores de hardware, componentes o servicios tecnológicos se ven afectados por un desastre natural, puede interrumpirse la cadena de suministro, lo que lleva a retrasos en la producción y la entrega de productos tecnológicos.
- Daños a la infraestructura de telecomunicaciones: Los desastres naturales pueden dañar las redes de comunicación, como cables de fibra óptica y torres de telefonía móvil. Esto puede dificultar la comunicación y el acceso a Internet, lo que afecta a las empresas que dependen de la conectividad.
- Aumento de la demanda de servicios de recuperación ante desastres: Tras un desastre natural, la demanda de servicios de recuperación ante desastres, como centros de datos de respaldo y servicios de copia de seguridad, aumenta significativamente, lo que puede resultar en costos adicionales para las empresas.
- Pérdida de activos físicos y tecnológicos: Los desastres naturales pueden destruir equipos, dispositivos y otros activos tecnológicos. La reposición de estos activos puede ser costosa y llevar tiempo.
- Problemas de seguridad de datos: La pérdida de control sobre la infraestructura tecnológica debido a un desastre natural puede aumentar los riesgos de seguridad de datos, ya que los sistemas pueden quedar expuestos a amenazas cibernéticas durante la recuperación.
- Impacto en la cadena de producción de tecnología: Si las instalaciones de fabricación de tecnología se ven afectadas por desastres naturales, esto puede llevar a la escasez de productos tecnológicos en el mercado, lo que afecta a la industria en su conjunto.
- Desafíos logísticos: Los desastres naturales pueden dificultar el transporte de componentes y productos tecnológicos, lo que puede afectar a la logística y a la capacidad de cumplir con los plazos de entrega.
Ejemplos reales de un desastre natural
Hay varios ejemplos de empresas que han experimentado desastres cibernéticos significativos en la historia reciente. Algunos de estos casos destacados incluyen:
Equifax (2017)
Equifax, una agencia de informes crediticios, sufrió un importante ciberataque en 2017, donde los datos personales de casi 147 millones de personas fueron comprometidos. La brecha expuso información sensible como nombres, números de seguro social y fechas de nacimiento.
Yahoo (2013-2016)
Yahoo experimentó varios ciberataques entre 2013 y 2016, que resultaron en la filtración de información de al menos 3 mil millones de cuentas de usuarios. La información robada incluía nombres, direcciones de correo electrónico, números de teléfono y contraseñas cifradas.
Sony Pictures Entertainment (2014)
Sony Pictures sufrió un ataque cibernético en 2014, donde los atacantes filtraron una gran cantidad de datos confidenciales, incluyendo correos electrónicos internos, información financiera y futuros lanzamientos de películas. Se atribuyó a un grupo vinculado a Corea del Norte.
Maersk (2017)
La empresa de transporte y logística Maersk fue víctima de un ataque de ransomware llamado NotPetya en 2017. El malware afectó sus sistemas informáticos a nivel global, causando interrupciones significativas en las operaciones y costándole a la empresa cientos de millones de dólares.
Target (2013)
Target, una cadena minorista, sufrió un ciberataque en 2013 que comprometió datos de alrededor de 40 millones de tarjetas de crédito y 70 millones de registros de clientes. El ataque se llevó a cabo a través de la infiltración de sistemas a través de un proveedor de servicios HVAC.
British Airways (2018)
British Airways sufrió un ataque cibernético en 2018, donde los datos de aproximadamente 500,000 clientes fueron comprometidos, incluyendo información personal y financiera. El ataque se realizó a través de la manipulación de formularios en el sitio web.